domingo, 1 de enero de 2012

OYERON Y CREYERON

Nacimiento de Jesús y los pastores

Porque se puede oír y no creer, y menos moverse y dar paso a la acción como consecuencia de haber creído. Pero, los pastores oyeron y creyeron dando paso a la acción de salir a toda prisa hacia el lugar que les había indicado el Ángel.

El acto de creer da paso a la acción de dar vida en aquello que se cree. Y los pastores se volvieron glorificando y alabando a Dios por todo lo que habían oído y visto, conforme a lo que se les había dicho. ¿Procedemos nosotros así cuando afirmamos que creemos?

Porque sin el encuentro, previo al anuncio, no se pueda dar la fe. La fe necesita que sea experimentada para que sea luego vivida. Y posteriormente anunciada. Es el caso de los pastores y de todos los que se han encontrado con JESÚS. Por eso, nuestra responsabilidad de anunciarlo, una vez encontrado y experimentado, nace del propio gozo del encuentro.

Fue lo ocurrido a los pastores. Y María y José, guardianes de esta dicha gozosa, contemplan pacientes y confiados las maravillas que de el Niño se cuentan. María, humilde y obediente, guarda todas estas cosas en su corazón y las meditas en la contemplación de la Voluntad de DIOS PADRE.