viernes, 13 de marzo de 2015

TODAS LAS NORMAS Y LEYES ESTÁN SOMETIDAS AL AMOR

Marcos 12, 28-34 
El amor abarca toda ley y norma establecida. Es verdad que la vida está regulada por norma que nos indica el camino y la actitud a seguir en cada instante, pero siempre adheridas y de la mano del amor. No se puede aplicar una ley o norma sin amor, porque si así fuere quedaría reducida a una simple norma o ley, que en muchos casos el amor la supera y la modifica.

Y un amor misericordioso, porque a veces la ley se ve superada por la buena intención del corazón que, generosamente, la suaviza para que pueda ser cumplida en beneficio del hombre y no le perjudique. Porque su finalidad y objetivo es servir para bien del hombre.

Por eso, el amor es el motor de toda ley o norma. La imagen la expresa muy claramente y casi deja muda a la palabra para su comprensión. Todo queda contenido en el amor al prójimo que descubre el verdadero amor a Dios. Porque cuando amas a Dios, lo reflejas en el prójimo. Y si no es así, reflejas un amor interesado en satisfacerte tú mismo. Y eso se nota, porque el tu propio ego sale a relucir.

La vida es emocionante y un reto hermoso. Cada instante de nuestras vidas no nos puede aburrir si lo tomamos como una aventura de amar. De amar al que pasa a nuestro lado o se relaciona con nosotros; de amar al que convive o trabaja en nuestro entorno; de amar al que se cruza en nuestro camino. De amar, porque primero me Ama Dios, por amor.

Pero no vayamos solos a correr esta hermosa aventura, porque no podremos vivirla. Hagámosla junto y en el Espíritu Santo. En Él podremos verdaderamente amar si nos ponemos en sus Manos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.

Tu comentario se hace importante y necesario.