viernes, 24 de mayo de 2019

UN MANDAMIENTO NUEVO

Resultado de imagen de Jn 15,12-17
Se nos había dicho "amarse unos a otros como a ti mismo", pero Jesús añade una novedad, que no cambia el sentido del contenido, sino que lo perfecciona con un Modelo de Perfección como es el mismo. Jesús es la referencia en la que tenemos que fijarnos para aprender a amar y para saber amar. Y eso lo voy conociendo en la medida que le conozco a El.

La pregunta salta por sentido común. ¿Y cómo le conozco a Él? Conociendo su Vida y su Palabra. ¿Y dónde las puedo encontrar? El Evangelio de cada día te describe y te descubre el Mensaje del Señor, sus mandatos y sus obras. Leyéndolo con atención y auxiliado por el Espíritu Santo, al que invocamos para que nos asista e ilumine, podemos ir alumbrando el camino de cada día. E injertándonte en la comunidad parroquial donde puede ir entrenándote en ese mandato del amor.

Pero, no para quedarte encerrado en ella sino para salir a las periferias, como nos dice el Papa Francisco, de tus ambientes, de tu trabajo, de tus círculos sociales, de tu menesteres de cada día e ir proclamando el Mensaje de Jesús, que no es otro sino alcanzar el gozo y la plena felicidad, que precisamente todos buscan, y la Vida Eterna.

¿No te parece que es un Mensaje que no se puede quedar guardado y que hay que darlo a conocer? ¿No crees que lo que buscan todos es realmente eso? Quizás ocurra que, engañados por el demonio, tengan los ojos vendados y los oídos cerrados y vivan distraídos seducidos por las cosas de este mundo que, aunque a primera vista, son hermosas, luego desaparecen dejándonos un vacío de tristeza e infelicidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.

Tu comentario se hace importante y necesario.