Es el gran regalo de Dios,
el Espíritu Santo. Nos lo dice Jesús antes de ir al Padre: (Jn 14,23-29): En aquel
tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Si alguno me ama, guardará mi Palabra, y
mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada en él. El que … Pero
el Paráclito, el Espíritu Santo, que el Padre enviará en mi nombre, os lo
enseñará todo y os recordará todo lo que yo os he dicho. …
Y en la hora de nuestro
bautismo, de ahí la gran importancia de recibirlo, el Espíritu Santo entra en
nosotros y esperará hasta que le abramos, ya en uso de razón, las puertas de
nuestro corazón para actuar en nosotros. Es decir, enseñarnos y recordarnos
todo lo que Jesús, el Señor, nos ha dicho. Son palabras de Jesús en el Evangelio
de hoy. Por tanto, abramos nuestro corazón al Espíritu Santo y llamémoslo como
nos ha sugerido el fallecido Papa Francisco que ya está en su presencia.
Y en el Espíritu Santo encontraremos el Camino, la Verdad y la Vida, y la paz estará con nosotros.