miércoles, 14 de noviembre de 2012

¿DERECHOS O GRATITUD?

 Evangelio: Lc 17, 11-19. “Señor, has dado a...

Este pensamiento surgió hoy en mí al ver en la tele una manifestación exigiendo el derecho a techo. No sé por qué me asaltó esa duda, pero al leer el Evangelio de hoy, suscitó en mí estos pensamientos que quiero compartir con ustedes, queridos amigos en el camino.

No cabe duda que todos los derechos, al menos yo lo veo así, nos vienen dado por la Ley Natural, y esa Ley Natural está impresa en el corazón de cada hombre por el Creador, nuestro Padre Dios. Pero nos ha sido dada de forma gratuita para que la administremos de forma justa y con sentido común.

Sentido común que significa buscar el bien de todos. Pero eso no se convierte en un derecho que podamos exigir sino más bien un derecho que debemos de dar y cumplir tal y como también a nosotros se nos ha dado gratuitamente.

Podríamos converger en que el derecho deriva de la caridad, pues nada merecemos y lo que nos ha sido dado lo es por simple donación. Luego, ¿cómo exigimos derecho de todas clases? Sin darnos cuenta exigimos que se nos proteja y sustenta y que nos ponga todo lo que necesitamos en las manos. 

Sin embargo, nosotros al margen de eso hacemos lo que nos apetece y queremos, sin mirar para los derechos de los otros. Ahí empleamos la actitud farisaica, la del cumplimiento, la de los méritos, la de los derechos. Pero, ¿derecho a qué? ¿No será que tendrás derecho a dar lo que también tú has recibido de forma gratuita?

En ese sentido, y por amor, debemos responder libremente al bien común y colaborar para proveer de techo a aquellos que no lo tienen, y de muchas cosas más hasta alcanzar una vida digna, pero quizás nos equivocamos en exigir por la vía de la fuerza y del derecho impuesto.

¿Tenían los diez leprosos derechos a ser curados? ¡Podrían también pedir techo y trabajo! Pidieron compasión y fueron curados porque Jesús tuvo compasión de ellos, y les mandó a que cumpliera con lo establecido. ¿Cuantos, al tomar conciencia de verse curados volvieron a dar gracias? Nos dice el Evangelio que solo uno. 

¿No estará pasando ahora lo mismo? Pedimos y pedimos pero, ¿no nos damos cuenta que todo nos ha sido dado gratuitamente y depende de nosotros que, agradecidos, sepamos comportarnos y cumplir con lo establecido?

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