domingo, 3 de marzo de 2024

LA EXPULSIÓN DE LOS MERCADERES DEL TEMPLO

Nos extraña la forma en la que actúa Jesús con aquellos que mercadeaban en el templo. Sabemos que no es su estilo pero al parecer no contuvo su enfado y arremetió de forma algo violenta contra aquellos mercaderes. Sin embargo, aunque no nos parezca bien pensamos y aceptamos que si el Señor actuó así, esa debía ser la forma correcta. Jesús nos conoce y sabe en cada momento como tiene que tratarnos.

A la pregunta sobre los signos que le piden los judíos, la respuesta de Jesús es contundente y no se hace esperar: «Destruid este Santuario y en tres días lo levantaré». Ellos, como también nosotros ahora, no lo entendemos. Porque, aunque ahora sabemos que se refería a su Cuerpo – la Resurrección al tercer día después de ser crucificado – muchos dudamos e incluso rechazan esa resurrección. Ha pasado mucho tiempo, pero todo sigue igual. Muchos se resisten a creer y, quizás sin darnos cuenta mercadeamos en el templo de alguna manera.

Quizás este Evangelio y está época cuaresmal nos puede servir de escenario para replantearnos nuestra fe y nuestra conversión de nuevo. Una fe y una conversión que debemos replantearnos todos los días asistidos e injertados en el Espíritu Santo. Pidamos esa Gracia y, sobre todo, que aumente nuestra fe.