martes, 28 de diciembre de 2021

SANTOS INOCENTES

Mt 2,13-18

No es cosa simplemente del pasado, ocurrió, eso sí, hace unos dos mil años aproximadamente, o quizás algo más, pero sigue sucediendo en nuestros días. Ayer no era legal y estaba catalogado como un delito, más hoy tiene la categoría de derecho. De cualquier forma, de una u otra manera, el resultado es el mismo, la muerte del inocente. Inocentes que, por la Gracia de Dios, son desde ese momento santos inocentes.

En el tiempo de Jesús, amenazado de muerte por Herodes, fueron víctima de esa amenaza, al no poder ser encontrado el Niño – huida a Egipto – otros muchos niños, creyendo que entre ellos estaba ese Jesús al que Herodes creía que amenazaba su reino. Todo interpretado erróneamente al creer que el Reino de ese Niño Dios era de este mundo. La ceguera, soberbia y el egoísmo de querer ser poderoso y rico incitan a esas barbaridades que llegan al extremo de ocasionar la muerte de otros inocentes.

No entraba en su atolondrada cabeza que ese Reino atribuido a ese Niño no era  un reino de este mundo, un reino material y caduco, sino un Reino Eterno que no pasará nunca y que nos espera tras el final de esta vida. Un Reino que será como resultado de la actitud que tú tengas en esta vida y del amor que tú gastes en hacer el bien y darte a los demás. Y es que muchos desesperados y sin fe cometieron barbaridades desperdiciando ese tiempo del don de la vida que les fue concedido simplemente para amar y hacer el bien.