domingo, 4 de mayo de 2025

NO SABEMOS CUANDO LLEGARÁ LA ABUNDANCIA PERO, SABEMOS QUE LLEGARÁ

Eso sí, sabemos que llegará porque confiamos en el Señor. Él está con nosotros aunque muchos de nosotros lo dudemos. Sucede que aquellos que dudan y, en consecuencia, se cierran a la luz del Espíritu Santo, permanecen en la oscuridad. Y eso es lo que posiblemente les ocurría a los apóstoles, como también nos sucede a nosotros.

Precisamente, ahora que estamos en la hora de elegir un nuevo Papa, pidamos que los cardenales en cónclave, abran sus corazones a la Luz del Espíritu Santo para que, iluminados, elijan al Papa que en este tiempo necesita la Iglesia.

Posiblemente, muchos se atribuyen el mérito de sus éxitos y sus obras, pero todo nos viene de Dios, creamos o no. No podemos demostrarlo, pero si venimos de Él, todo nos es dado por y en Él. El pasaje evangélico de hoy nos revela claramente como Dios actúa en nuestra vida, y como la oscuridad se hace luz en abundancia cuando nuestra mirada y esperanza está puesta firmemente en Él, Alimento y Gracia para nuestra vida.