sábado, 5 de noviembre de 2022

LA VERDAD DESCUBRE LA MENTIRA

Si andas con la mentira, pronto tu aparente verdad será descubierta. Y te descubres en las pequeñas cosas, en lo parece insignificante y que nadie lo tiene en cuenta. Porque, quien no es fiel en lo pequeño, tampoco será en lo grande. Por los detalles se conoce la verdad de las personas o la mentira que esconde en sus falsas apariencias.

Nadie se fiará de ti cuando observa que no eres fiel en lo pequeño. ¿Cómo así te va a confiar lo grande? Nadie pondrá su confianza en ti cuando ve que el valor importante en tu vida es el poder y el dinero. Porque, si tu dios es el dinero, te olvidaras del pobre y de la pobreza y, en consecuencia, detestarás al pobre, al que nada tiene y al débil. Y es que nunca podrás servir a dos señores. O estás con Dios y pones el acento de tu vida en el amor y la misericordia, o te sometes al dinero y eres infiel con Dios y al amor a los demás. Sobre todo a los pobres.

Por lo tanto, si piensas en escalar, en subir, en las riquezas y el poder, has escogido un camino opuesto al que te señala el Señor. El amor es el camino propuesto por Jesús, y lo propone no solo con su Palabra, sino también con su Vida. Seguirle y serle fiel supone, por tanto, el esfuerzo de imitarle. Y sin estar injertado en Él y alimentado de su Cuerpo y Sangre no podrás imitarle.

De modo que, la primera cosa que hay que dejar, para seguir a Jesús, es la arrogancia. Luego, despojado de esa dificultad, abajarse humildemente y limpio de todo aquello que te pueda hacer pensar que te basta por ti mismo, ponerte en sus Manos y dejarte amar inmensamente por su Infinita Misericordia. Él hará el milagro en cada uno de nosotros si nos abrimos a su Gracia.