martes, 28 de noviembre de 2023

MIENTRAS, CONSTRUYAMOS EL REINO

Es evidente que cada época trae sus contratiempos y tragedias. De siempre hemo oído y conocido grandes terremotos, huracanes, tsunami y catástrofes de todo tipo. Y en la actualidad se siguen produciendo. Muchos quieren avisarnos de que eso preconiza el final del mundo; otros aprovechan para ordenar el mundo y organizarlo según sus ideas, proyectos e intereses, y muchos andamos confundidos con tantos avisos y advertencias.

No nos confundamos. Jesús nos lo deja muy claro en el Evangelio de hoy martes: (Lc 21,5-11): En aquel tiempo, como dijeran algunos acerca del Templo que estaba adornado de bellas piedras y ofrendas votivas, Jesús dijo: «Esto que veis, llegarán días en que no quedará piedra sobre piedra que no sea derruida».

Le preguntaron: «Maestro, ¿cuándo sucederá eso? Y ¿cuál será la señal de que todas estas cosas están para ocurrir?». Él dijo: «Estad alerta, no os dejéis engañar. Porque vendrán muchos usurpando mi nombre y…

Mira y observa lo que está pasando. Hay muchos comentarios y muchos que están empeñados en aventurar lo que va a suceder en varios años y que el mundo se va a destruir…Otros nos hablan de deshielos, de contaminación y de medidas ecológicas, sin embargo todos siguen el mismo ritmo de vida, sobre todo los más poderosos, y pocos son los que se preocupan por cuidar el mundo que Dios nos ha dejado.

Todo llegará a su tiempo El Señor nos ha revelado las señales y prodigios que aparecerán y de que nos advertirán de que el fin no será enseguida. Mientras, sigamos nosotros, los que creemos en la Palabra del Señor, esforzándonos en cuidar el mundo de la mejor manera que podamos y establecer, en la medida de nuestras fuerzas y capacidades, el Reino de Dios en este mundo.