viernes, 16 de abril de 2021

¡COMODIDAD, PURA TENTACIÓN!

Jn 6,1-15

Una mirada serena, sincera y seria - tres s - supone darnos cuenta de nuestro interés verdadero por seguir a Jesús. Detrás de nuestro seguimiento, quizás sin advertirlo de forma muy consciente, se esconde siempre - por y causa de nuestro pecado - un deseo de búsqueda cómoda y fácil para acomodar nuestra vida a nuestros deseos y apetencias.

Seguimos a Jesús, en la mayoría de los casos, buscando comodidades y soluciones a los problemas que se presentan en nuestra vida y a las necesidades vitales e imprescindibles - alimento y salud - que nos plantea nuestro camino. El Señor, que nos conoce muy bien y llega al fondo de las intenciones de nuestro corazón, conoce y sabe de nuestros defectos, egoísmos, apetencias e intenciones. No le engañamos, pero, quizás, por su Infinita Misericordia, el Señor quiere dejarse engañar. Su Amor es Inmenso y sin límites.

Así y todo, su Misericordia nos salva. Se preocupa por nuestras necesidades presentes y, tal y como narra el Evangelio de hoy, multiplica aquellos cinco panes y dos peces que tenía aquel muchacho para alimentar a todos los que le habían seguido. Sabe, y por eso lo hace, la importancia de esos signos milagrosos que, en primera instancia mueve a la gente a seguirle y que, conociéndolo, el Señor nos atiende y se preocupa por cada uno de nosotros.

Por nuestra parte, tratemos de abrir nuestro corazón y dejarnos invadir de Espíritu Santo para que nuestro seguimiento al Señor sea un seguimiento sereno, sincero,  y serio, apoyado en la verdad, en el amor y agradecimiento por todo lo que nos ha dado y por lo que nos da, la Vida Eterna.