martes, 22 de octubre de 2024

EN ESPERA

Creo que ese debería ser el lema de nuestra vida: «Somos seres en actitud de espera» Porque, sabemos que nuestro recorrido una vez que empieza tiene un fin. Y de ese fin – que es cierto y seguro – no conocemos la hora ni el momento. Por tanto, siendo lo más importante de nuestra vida, debemos tenerlo muy presente y estar muy atentos.

¿Y por qué es muy importante? Porque, de la actitud que tengamos en nuestra espera dependerá nuestra felicidad eterna. ¿No es eso lo que buscamos? Pues, se esconde ahí, en nuestra actitud de saber esperar, aguardando con astuta vigilancia y esperanza de que nos llegue consciente de que viene el Señor.

Ese es el momento principal y más importante de nuestra vida. Todo dependerá de que el Señor nos sorprenda preparados, con la lámpara encendida y nuestra alcuza llena del aceite de buenas obras de amor y misericordia gratuitas.

Y eso exigirá estar alerta, que no significa estar preocupado y en vigilancia activa y continua, sino en atención y escucha permanente a la Palabra del Señor, que está presente y que será el Único que estará contigo en tu hora final. Nadie podrá acompañarte al encuentro con tu Padre Dios sino el Hijo, nuestro Señor Jesús. De ahí que nuestra relación diaria, continua y permanente con Él sea de vital importancia.