domingo, 24 de noviembre de 2024

REY DE LA VERDAD Y AMOR MISERICORDIOSO

La grandeza de Jesús no está en su apariencia estética y carencia de poder, sino en la de ser el Hijo predilecto y amado de su Padre que le ha enviado a proclamar la Verdad. Su Reino, por tanto, es un Reino de Verdad y de Amor Misericordioso. Por eso, todos los que creen en Él vivirán en el gozo y la plenitud de la felicidad eterna.

Es evidente que aquí no está ni se encuentra el Reino de Dios. La vida, nuestra vida y nuestro mundo, es un camino donde tendremos que ganarnos – por decirlo de alguna manera – la eternidad gozosa y plena junto a nuestro Padre Dios.

Y digo «por decirlo de alguna manera» porque todo es regalo de Dios. Nada merecemos ni nada tenemos. Todo es Gracia gratuita de nuestro Padre Dios. Su Amor – que nunca llegaremos a comprender en este mundo – es Infinito y Misericordioso. Y gracias a eso tenemos la ocasión y oportunidad de ganarnos esa felicidad eterna que buscamos y perseguimos en este mundo.

Por tanto, busquemos esperanzados la Verdad. La Verdad con mayúscula que la trae nuestro Señor Jesús. Es precisamente esa Verdad la que nos hará libres, y, a pesar de ser un camino de cruz, dará sentido y esperanza a nuestro camino y nos dará gozo y Vida Eterna.