sábado, 28 de diciembre de 2024

TIEMPO SUBVERSIVO E INSURRECTO

Es Navidad y nace un deseo de paz y gozo en el interior del corazón humano. Sin embargo, al mismo tiempo, los poderosos se sienten amenazados por ese deseo de paz y amor, y sienten la tentación de dejar claro que son ellos los que mandan y los que tienen que ver con la paz y el amor.

La soberbia, la vanidad, las ambición son pecados que se resisten a la Navidad. Porque, Navidad es tiempo de paz y amor nacidos de ese Mesías que nace en ese tiempo elegido por Dios y que viene enviado por Él a anunciar a los hombres su Infinito Amor y Misericordia.

La Buena Noticia que es anunciada a los pastores y que les llena de esperanza contrasta con la obstaculización promovida por los poderosos que se sienten amenazados por ese Niño Dios nacido en Belén. Una amenaza que sólo sale de sus corazones endiosados, ensoberbecidos, mal intencionados y egoístas. Causa de ese ensoberbecimiento origina la muerte de los santos inocentes, víctimas siempre de aquellos que no quiere transigir con lo que es inhumano.

Los Herodes de todo los tiempos estarán siempre en pie de guerra al sentirse amenazados por la verdad, la justicia y la paz. Y por la esperanza de un mundo mejor, más digno y fraterno, en el que todas las personas somos hijos de un mismo Padre Dios. Belén representa todo eso que cualquier hombre, desde el más inhóspito rincón de este mundo, alberga en lo más profundo de su corazón: Amor y Paz. Y eso, al parecer, está reñido con los soberbios y poderosos.