lunes, 27 de mayo de 2019

SIN EL ESPÍRITU SANTO NO VAMOS A NINGUNA PARTE


Imagen relacionada
La necesidad del Espíritu Santo es vital, porque sin Él no vamos a ninguna parte. Es decir, es Él quien nos abrirá la mente y nos iluminará para poder entender todo aquello que no cabe en nuestra cabeza y para lo que nuestras limitaciones no puede llegar a entender. Jesús nos lo deja claro: «Cuando venga el Paráclito, que yo os enviaré desde el Padre, el Espíritu de la verdad, que procede del Padre, Él dará testimonio de mí. Pero también vosotros daréis testimonio, porque estáis conmigo desde el principio. Os he dicho esto para que no os escandalicéis. Os expulsarán de las sinagogas. E incluso llegará la hora en que todo el que os mate piense que da culto a Dios. Y esto lo harán porque no han conocido ni al Padre ni a mí. Os he dicho esto para que, cuando llegue la hora, os acordéis de que ya os lo había dicho».


 El Espíritu Santo nos fortalecerá y nos dará todo lo que nos haga falta para entender interiormente lo que, por nosotros no podemos entender para recordar todo lo que se nos ha enseñado. El Espíritu Santo es el auxiliador, el que nos acompaña en cada momento de nuestra vida y que nos va asistiendo y enseñando todo lo que necesitamos para sostenernos en la fe y en la perseverancia de guardar la Palabra del Señor.

El Espíritu Santo, el Paráclito, da testimonio de nuestro Señor, y nos da también a nosotros fortaleza y sabiduría para dar testimonio de nuestro Señor Jesús, porque Él está con nosotros y nos acompaña durante el camino de nuestra vida. Todo lo que está sucediendo ahora está profetizado y se nos ha dicho para que cuando lo estemos sufriendo nos acordemos de que así iba a suceder.

Tengamos confianza y fe en el Señor. Hay muchas cosas que nos superan y que el miedo y temor a que nos sucedan nos desconcierta y nos hace dudar, pero no olvidemos que la Palabra del Señor siempre se cumple. Y, Él, esta con nosotros, se nos ha dicho, y en Él no tendremos nada que temer, porque Él es el Camino, la Verdad y la Vida.