lunes, 16 de enero de 2012

ESTANDO EN Y CON ÉL, ¿CÓMO VAMOS A AYUNAR?

 Mc 2,18-22. “¿Por qué los discípulos de Juan y los discípulos de los ...

No se puede ayunar cuando se está con el Esposo. En las fiestas esponsales se baila y se come, se está de fiesta y en gozo. No cuadra ayunar en estos momentos, porque JESÚS está con nosotros y son momentos de preparación y de formación para más tarde ayunar.

Pero ahora no toca. Llegará un día en que se lleven al novio; aquel día sí que ayunarán. Porque en esos momentos necesitamos oración y sacrificios para fortalecernos para esa vida nueva que JESÚS nos propone. Debemos arrimar lo viejo y caduco para un lado.

Entre los que escuchaban al Señor, la mayoría serían pobres y sabrían de remiendos en vestidos; habría vendimiadores que sabrían lo que ocurre cuando el vino nuevo se echa en odres viejos. Les recuerda Jesús que han de recibir su mensaje con espíritu nuevo, que rompa el conformismo y la rutina de las almas avejentadas, que lo que Él propone no es una interpretación más de la Ley, sino una vida nueva.

¿Y nosotros, qué actitud tenemos ante esta propuesta de JESÚS? ¿Nos predisponemos a crecer, a entregarnos a cambiar? No desesperemos por nuestra debilidad y apegos, pues sabemos de quien nos fiamos y en qué manos nos ponemos. Tengamos confianza que el SEÑOR nos ayudará a convertirnos en hombres nuevos.