Supongo que será una buena opción tomar una actitud de niño, abajarnos humildemente y tratar de escuchar este hermoso cuento. ¿No se modificarían muchas portadas de periódicos de nuestro tiempo imitando esta actitud del samaritano?
No se te van a pedir tus éxitos, sino el amor que hayas gastado en beneficio de los demás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.
Tu comentario se hace importante y necesario.