martes, 21 de mayo de 2019

SER FELIZ ES ESTAR EN PAZ

Imagen relacionada
No cabe duda que cuando se está en paz se es feliz. Y eso lo hemos experimentado todos los seres humanos. Hay momentos que cuando nos sentimos en paz, nos sentimos tremendamente felices. La paz nos hace feliz y por eso el mundo busca la paz. Pero, la paz que nos da el mundo no es como la paz que nos da Jesús. Porque, aunque aparentemente se proclame la paz, la violencia, las disputas, los enfrentamientos, guerras, terrorismo, conflictos directos y otros se encargan de que no haya paz.

Por otro lado, si interiormente se está a disgusto, se tiene conflictos, desasosiego, preocupaciones excesivas, o temores, a pesar de que haya tranquilidad afuera, tú no tienes paz. Diríamos, entonces, que hay dos clases de paz, la exterior y la interior, y ambas están afectadas por el pecado que nos tienta egoístamente y nos enfrenta a unos con otros. Todo esto origina conflictos, no sólo exteriores sino también interiores.

La paz que nos trae Jesús, por el contrario, es una paz que afecta a lo exterior desde lo interior. Porque, lo que Jesús nos propone desde lo más profundo de nuestros corazones tiene influencia total en lo exterior. Porque, es lo que sale del corazón lo que realmente mancha y enturbia la vida del hombre, así que, si sale purificado y limpio, todo lo exterior también quedará purificado y limpio. Y se producirá la paz tanto exterior como interior.

Porque, nuestro destino no está en este mundo ni en las cosas de este mundo. Por eso, desapegándonos de las cosas de este mundo quedaremos libres de conflictos, de egoísmos, de luchas por conseguirlos, de búsqueda de éxitos, de honores y de enfrentamientos por tener unos más que otros. Por ser más poderosos unos que otros. 

Y es eso lo que nos promete Jesús, una paz que nos libera de las ataduras caducas de este mundo y del poder del príncipe de este mudo. Luego nuestro corazón quedará en paz al no ambicionar las cosas caducas de este mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.

Tu comentario se hace importante y necesario.