miércoles, 9 de julio de 2025

NECESIDAD DE COLABORADORES

Lo podía hacer solo, pero quiso contar con colaboradores. No sabemos por qué, pero así es. Y para ello eligió en principio a doce apóstoles, a los que les dio autoridad para expulsar malos espíritu y curar toda enfermedad. Quiere que colaboremos con su Hijo haciendo lo mismo que Él. Quizás nos parezca extraño e incomprensible, pero, ¿entendemos a Dios? Si llegaremos a entenderlo dejaría de ser Dios.

—¿Qué te parece Pedro, ¿te sientes colaborador del Señor?
Esa fue la pregunta que Manuel lanzó a Pedro, su amigo, a quien tenía al lado tomando su acostumbrado café de mediodía.
—Supongo, y entiendo que desde el momento de mi bautizo, aunque siendo niño no era consciente de nada, quedamos marcados para, asistidos por el Espíritu Santo, responder a nuestro compromiso de bautismo. ¿No es así?
—Cierto, así es. Más, otra cosa es que queramos. Muchos, al parecer, entiende que primero está sus objetivos, sus intereses, sus placeres y satisfacer sus gustos y comodidades sin importarles, al menos mucho, la situación de los demás. Sin embargo, por la Gracia de Dios, otros si tratan de responder a ese compromiso de bautismo. Ahora, ¿puedo preguntarte dónde te encuentras tú?
—Por supuesto, no tengo ningún inconveniente. Mi actitud e intención es estar a su lado. Es decir, tratar de vivir en su Voluntad, y, con mi vida, actitudes y actos dar a conocer, como no puede ser de otra manera, su Amor Misericordioso a todos los hombres y mujeres de este mundo. Sin condiciones de raza, color, situación, riqueza, creencia … etc.  —Ahora, también te digo que fallo, que defraudo y necesito el sacramento de la reconciliación para, tras caer, levantarme y seguir adelante.
—Has hablado como un libro abierto. Suscribo todo lo que has dicho. Y corroboro lo del compromiso del Bautismo. Su gran importancia. En él recibimos al Espíritu Santo, el mismo que recibió nuestro Señor Jesús, y, por y con Él, estamos capacitados para hacer, por la fe, obras como las que hizo Jesús. No son palabras mías – Jn 14, 12 – sino del mismo Jesús. Así que es mandato del Señor.

       Los dos amigos lo tenían claro. Ahora nos toca a nosotros. ¿Lo tenemos también claro? No se trata de volvernos locos, sino de pensar que en cada instante de nuestra vida estamos, queramos o no, relacionados con otros: familia, trabajo, amigos, circulo social … etc., y es donde debemos procurar, con nuestros actos de amor y misericordia transparentar la Buena Noticia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.

Tu comentario se hace importante y necesario.