miércoles, 17 de octubre de 2012

HACER LAS COSAS POR TI...


 ... DEL EVANGELIO (Lucas 11, 42-46) Pero, ¡ay de...

y no por amor a Dios y a los hermanos. En el fondo de nuestro actuar distinguimos claramente cuando hacemos las cosas desinteresadamente por otros y no por nosotros. Eso se nota enseguida, lo percibes muy claramente y pesa y duele bastante.

Esa quizás es la característica más notoria y que nos determina claramente si estamos en el camino del amor y del desinterés. En muchos momentos, repentinamente nos llega un SOS de ayuda, de necesidad. No son grandes cosas, sino pequeños detalles insignificantes que nadie los notan, pero son pruebas gigantes de nuestra disponibilidad y de nuestro amor.

Estamos sentando agradablemente en una mesa tomando un buen café. Una buena tertulia y lo pasamos bien, incluso nos hace mucho bien. La conversación es interesante y nos entusiasma. De repente, alguien nos solicita para llevarle al aeropuerto o cualquier otro favor. Necesita de nosotros o de alguien que le resuelva tal necesidad. Es el momento de amar, de darse, de ponerse al servicio, pero cuesta levantarse, dejar esa buena tertulia, salir de mi agradable instalación.

Realmente cuesta, pero sin dolor y desprendimiento el amor es imposible. Es entonces cuando experimentamos la necesidad de la oración, del Espíritu que nos fortalece y nos ilumina.  ¡Ay de vosotros, los fariseos, que amáis el primer asiento en las sinagogas y que se os salude en las plazas! ¡Ay de vosotros, pues sois como los sepulcros que no se ven, sobre los que andan los hombres sin saberlo!».

Cuidado de hacer esas cosas para ser visto, para que se hable de ti y te tiren flores. En el corazón queda escrito la verdad de tus actos y el interés de tu disponibilidad. De nada te vale actuar con otras intenciones que no sean buscar el servicio, la disponibilidad y el amor tal y como Jesús te ama.

De nada vale que pagues el diezmo si, desde tu corazón no buscas la justicia y el amor en verdad y sin interés. Sólo hay un camino de amar, y es darse sin pedir nada a cambio, tal y como nos ama nuestro Padre del Cielo. Amén.

martes, 16 de octubre de 2012

LAS APARIENCIAS ENGAÑAN...

 Evangelio según San Lucas 11, 37-41

y de nada sirven pues la verdad se escribe en el corazón y ahí llega Dios que lo ve todo.Observo a muchas personas que a la hora de ir a comulgar eligen la fila donde haya un sacerdote dándola. Piensan que la persona (seglar) que la distribuye en la otra fila no es pura. ¿Acaso son puras las de los sacerdotes?

De la misma forma, otros discuten que la Sagrada forma debe ser recibida en la boca y no en las manos. ¿Acaso la lengua es más pura que las manos? Creo que la Palabra de hoy nos viene muy bien para clarificarnos los criterios a este respecto.

No manchan las cosas de fuera sino las que se gestan dentro, porque todo lo que se hace fuera se ha generado dentro previamente. Son las actitudes y las intenciones que nacen en el corazón y la mente las que llevan el mal o el bien. No lo que reluce fuera tiene mucho que ver, sin dejar por eso de tener su importancia, pero lo verdaderamente importante es lo que hay debajo de la alfombra.

Porque de nada sirve ocultar y aparentar limpieza cuando por dentro se está podrido y corrupto. Las verdaderas obras están unidas a la pureza interior. Esas son las que perseveran y se mantienen en la verdad porque provienen del corazón.

Que nuestra vida sea conforme con nuestro pensamiento y obras, y todo lo que se reluzca con brillo y verdad corresponda a lo que se piensa y se siente en el corazón. Te lo pedimos, Señor, a Ti que vives y reina por los siglos de los siglos. Amén.

lunes, 15 de octubre de 2012

NIÑO HEMOS NACIDO Y...

 Evangelio según San Mateo 11,25-30. En esa oportunidad, Jesús dijo: "Te ...

niño debemos seguir siendo toda nuestra vida. Ser como niño no es permanecer en el infantilismo psicológico permanente, sino en seguir siendo dóciles a las enseñanzas de nuestro Padre Dios que nos ha creado y nunca nos abandonará. Somos nosotros quienes tendremos que abandonarnos en sus Manos.

El niño se caracteriza porque se fía de sus padres, y es así como aprende y se hace hombre. El niño obedece ciegamente lo que le dicen sus padres, y con ellos se atreve a todo, se arriesga a todo y se deja vestir, alimentar, curar y formar. Esa característica del niño es la que, nosotros los mayores, debemos de guardar y nunca perder. Sólo así podremos estar en el camino de salvación.

Esta vida nuestra es muy corta y a pesar de parecernos grande se va en un suspiro. Nuestros primeros pasos los damos cogidos de la mano de nuestros padres. A ellos nos confiamos sin titubeos y con confianza. Pues de esa misma forma, ya siendo mayores, debemos agarrarnos a nuestro Padre Dios porque en esta corta vida siempre estaremos aprendiendo cogidos de la Mano de nuestro Padre Dios.

Ser pobre y humilde en clave de dejarnos guiar por el Espíritu Santo enviado por el Padre y el Hijo, no está de moda. Nos cuesta dejarnos guíar. Necesitamos ser humilde y ese es el único camino para llegar al encuentro con Jesús, Camino, Verdad y Vida.

domingo, 14 de octubre de 2012

BUSCA TU SEGURIDA EN DIOS

 Mc 10, 17-30 Cuando salía para ponerse en...

Eso se experimenta solo en la pobreza. Ayer, después de terminar la catequesis prebautismal me quedé hablando con un abuelo. Sólo había venido él a la catequesis. Venía enviado de otra parroquia y supuse que, como latino americano, no disponía de mucho tiempo para estos menesteres.

Venía algo despistado y al colaborar con la parroquia dejaba 50 €. Me pareció mucho por su aparente condición de emigrante y trabajador, y le advertí que la parroquia solo pedía, en caso de poder colaborar, treinta euros, y si no se podía solamente lo que pudiesen. El no tenía cambio y estaba dispuesto a dejar los 50 euros. Entonces le devolví 15 € que yo tenía y ya los recuperaría más tarde.

Me llamó la experiencia de comprobar que cuanto más pobre, más despegado y generoso. Me dijo que trabajaba en el campo, concretamente en Tabayesco, a unos treinta km. de Arrecife - Altavista - donde vive con su familia. Allí se dedicaba a hacer servicios de reparaciones en donde lo necesitaran, y acudía a cualquier hora que lo llamaran. Un poco de todo: albañilería en general, electricidad, fontanería, carpintería... pequeñas reparaciones que siempre se necesitan.

Cobra a 10 € la hora, pero si algo es tan poco que lo termina en media hora, cobra la mitad, es decir, cinco euros media hora. Pero lo importante, y por qué lo cuento aquí, fue porque derramaba entusiasmo por las cosas de Dios. Me contaba lo agradecido que estaba con su Padre Dios. Siempre se sentía escuchado, protegido y querido. Y era muy feliz con lo que tenía, sobre todo con su familia. 

Adoraba a su esposa y se sentía el hombre más feliz cuando por las mañanas su querida esposa le servía un poco de café calentito en la cama. Iba al trabajo agradeciéndole a Dios todo lo que tenía: su humilde trabajo y familia. Me sentía interpelado viendo tanta dicha con tan poco. Pero sobre todo la inseguridad de salir cada día a esperar si le vendría alguna llamada o un poco de trabajo. Y lo confiado y feliz que estaba apoyado en su Padre Dios.

Me dije si eso no serán los primeros allá en el Reino de los Cielos. Todos los domingos acude a la Eucaristía de las 19,30 horas e imagino que será una gran dicha suponer su diálogo con el Señor. Observé que estuvo atento durante toda la reflexión y asentía con una cara felicidad todo lo que reflexionábamos en aquellos momentos.

 Más tarde, en nuestro diálogo personal, me agradeció mis palabras calificándolas como sabias y hermosas. Me quedé sin saber que decir, pero en lo más profundo de mi corazón le hice un guiño al Espíritu Santo, porque, como hago siempre, nos pusimos en su presencia antes de empezar la reflexión. Experimenté su presencia y su acción, y en mi interior di gracias por hacerse presente entre nosotros. Él era el artífice de aquellas palabras que a Jorge les parecían sabías y tanto le habían gustado.

Hoy, en la Eucaristía dominical de la tarde del sábado, experimenté que solo los pobres son capaces de embarcarse en seguir al Señor. Y pobre significa desprenderse de todo aquello que te lo impide, y sabemos por experiencia que la soberbia, la vanidad, la avaricia, las riquezas, el poder, la fama, la comodidad, el bienestar, el placer, el sexo, el prestigio, los bienes y... nos impiden amar, y si no amamos nada podemos hacer, porque seguir a Jesús es implicarse en amar a tus hermanos.

Y cuando experimentas el amor agape descubres que has encontrado ese tesoro que andabas buscando. lo creías tan lejos y lo tienes ahí, delante de ti, está en tu hermano, ese que tienes tan cerca. Porque amando al estilo de Jesús a ese tu hermano, encontrarás esa felicidad eterna que buscas sin saber ni donde ni en que realmente consiste.

Danos, Señor, un corazón de carne capaz de sentir compasión y misericordia, para que en los momentos de desprendernos tengamos la fuerza y la voluntad de llevarlo a cabo para no perder el ritmo de tus pasos. Amén.

sábado, 13 de octubre de 2012

VIVIR EN TU PRESENCIA...

 Evangelio según San Lucas

porque solo en tu presencia puedo cumplir tu Palabra. Cuando me alejo y me sumerjo en el murmullo del ajetreo mundano y me dejo arrastrar por la corriente de los criterios de los hombres, experimento que mi amor se personaliza y se hace egoísta.

Sin la presencia del Señor, mis fuerzas están a merced del mundo, y sus tentáculos me pueden y me apasionan. Soy pasto de las llamas que me devoran y la Voluntad del Padre queda desdibujada y olvidada. Me pierdo en el mundo y sus criterios.

Porque los criterios del mundo son interesados, egoístas y miran solo para el bien personal. Donde hay amor es un amor interesado, movidos por objetivos personales e intereses egoístas. Así nada importa sino yo, y mi yo prima antes que el tú, y por esa primacía estoy dispuesto hasta matar.

Por eso, en tu presencia, Señor, me fortalezco y me siento capaz de guardar tu Voluntad injertado en tu Hijo Jesús. Claro, la dicha nos viene por el esfuerzo en cumplir la Voluntad del Padre. Y esa Voluntad no es otra que la de esforzarnos en amarnos como Él, en su Hijo Jesús, nos amó y nos ama.

Y amar es buscar el bien del otro, molestarse y preocuparse por el otro. Amar es olvido de mí para estar pendiente de ti. Es difícil, diría imposible, pero confío y tengo la esperanza de que en el Señor podemos lograrlo, porque Él en su Hijo Jesús lo logró. 

Y tenemos al Espíritu Santo para nosotros también ahora lograrlo. Pongamosno en sus Manos y confiemos en que en Él podremos alcanzar la dicha de ser dichosos porque, al oír la Palabra, cumplimos la Voluntad del Padre guardando su Palabra. Amén.

viernes, 12 de octubre de 2012

OÍR PARA VIVIR

346 × 275 - Lc 11, 27-28

No se trata de decir cosas bonitas, ni tampoco hablar de justicia, verdad y amor. Se trata del esfuerzo constante y permanente de lo que oyes, en este caso la Palabra de Dios, llevarla a la vida y concretarlo en tu familia, tu trabajo, tu círculo de amigos y tu tiempo de recreo y ocio.

Se trata de ser bombilla con patas y donde quieras que estés ser luz, camino y verdad para los que te rodean y comparten la vida contigo. Se trata en definitiva de cumplir la Voluntad de Dios. Son esos los verdaderos amigos de Jesús, y los verdaderamente dichosos.

Porque la dicha no se encuentra en la escucha y comprensión de la Palabra, sin en, después de escucharla y comprenderla, ponerla en práctica. Porque solo lo que se experimenta y se palpa convence y transforma.

Y eso es lo que dice Jesús: «Dichosos más bien los que oyen la Palabra de Dios y la guardan».

jueves, 11 de octubre de 2012

PORQUE TE NECESITO, DIOS MÍO...

 Evangelio según San Lucas 11,5-13. Jesús agregó: "Supongamos que alguno de ...

estaré toda mi vida pidiéndote. Porque dejar de pedir es como perder la fe. Quien no pide puede tener fundamentalmente dos razones: a) que no necesita pedir porque está abastecido; b) que ha perdido la confianza en que le atienda, escuche y conceda el Padre del Cielo.

Por eso, Jesús, el Hijo predilecto y amado; el Hijo que nunca perdió la confianza en el Padre, nos invita a no desfallecer y pedir. Nos invita a ser inoportuna incluso con el Padre, porque nuestra constancia, insistencia y fe en pedir es la oración que conmueve al Padre y que revela nuestra confianza y fe en Él.

Así nosotros, los blogueros, no debemos desfallecer y continuar nuestra lucha por congregarnos, vernos, saber de nosotros. Somos una familia que nos reunimos una vez al año. Una familia presidida por Jesús y comandada por el Papa. Unos blogueros que nos une nuestro afán evangelizador y nuestras ansias que el Reino de nuestro Padre Dios se establezca en la tierra.

Sigamos, pues, pidiendo sin descanso. Pongamos en marcha lo del SMS, amigo inoportuno, la cuota o donativo mensual o anual, y cuantas iniciativas puedan contribuir a fortalecer nuestra unión y nuestra convocatoria anual. Nuestros amigos nos lo están pidiendo y tocan a nuestra puerta.

Pero sobre todo, no olvidemos que sin dejar de ser Marta, apliquemosno también en ser María. Nuestro camino debe siempre ir orientado, orientado por la brújula del Espíritu Santo y apoyado en el estilo de vida de Jesús: "El amor".