lunes, 15 de octubre de 2012

NIÑO HEMOS NACIDO Y...

 Evangelio según San Mateo 11,25-30. En esa oportunidad, Jesús dijo: "Te ...

niño debemos seguir siendo toda nuestra vida. Ser como niño no es permanecer en el infantilismo psicológico permanente, sino en seguir siendo dóciles a las enseñanzas de nuestro Padre Dios que nos ha creado y nunca nos abandonará. Somos nosotros quienes tendremos que abandonarnos en sus Manos.

El niño se caracteriza porque se fía de sus padres, y es así como aprende y se hace hombre. El niño obedece ciegamente lo que le dicen sus padres, y con ellos se atreve a todo, se arriesga a todo y se deja vestir, alimentar, curar y formar. Esa característica del niño es la que, nosotros los mayores, debemos de guardar y nunca perder. Sólo así podremos estar en el camino de salvación.

Esta vida nuestra es muy corta y a pesar de parecernos grande se va en un suspiro. Nuestros primeros pasos los damos cogidos de la mano de nuestros padres. A ellos nos confiamos sin titubeos y con confianza. Pues de esa misma forma, ya siendo mayores, debemos agarrarnos a nuestro Padre Dios porque en esta corta vida siempre estaremos aprendiendo cogidos de la Mano de nuestro Padre Dios.

Ser pobre y humilde en clave de dejarnos guiar por el Espíritu Santo enviado por el Padre y el Hijo, no está de moda. Nos cuesta dejarnos guíar. Necesitamos ser humilde y ese es el único camino para llegar al encuentro con Jesús, Camino, Verdad y Vida.

domingo, 14 de octubre de 2012

BUSCA TU SEGURIDA EN DIOS

 Mc 10, 17-30 Cuando salía para ponerse en...

Eso se experimenta solo en la pobreza. Ayer, después de terminar la catequesis prebautismal me quedé hablando con un abuelo. Sólo había venido él a la catequesis. Venía enviado de otra parroquia y supuse que, como latino americano, no disponía de mucho tiempo para estos menesteres.

Venía algo despistado y al colaborar con la parroquia dejaba 50 €. Me pareció mucho por su aparente condición de emigrante y trabajador, y le advertí que la parroquia solo pedía, en caso de poder colaborar, treinta euros, y si no se podía solamente lo que pudiesen. El no tenía cambio y estaba dispuesto a dejar los 50 euros. Entonces le devolví 15 € que yo tenía y ya los recuperaría más tarde.

Me llamó la experiencia de comprobar que cuanto más pobre, más despegado y generoso. Me dijo que trabajaba en el campo, concretamente en Tabayesco, a unos treinta km. de Arrecife - Altavista - donde vive con su familia. Allí se dedicaba a hacer servicios de reparaciones en donde lo necesitaran, y acudía a cualquier hora que lo llamaran. Un poco de todo: albañilería en general, electricidad, fontanería, carpintería... pequeñas reparaciones que siempre se necesitan.

Cobra a 10 € la hora, pero si algo es tan poco que lo termina en media hora, cobra la mitad, es decir, cinco euros media hora. Pero lo importante, y por qué lo cuento aquí, fue porque derramaba entusiasmo por las cosas de Dios. Me contaba lo agradecido que estaba con su Padre Dios. Siempre se sentía escuchado, protegido y querido. Y era muy feliz con lo que tenía, sobre todo con su familia. 

Adoraba a su esposa y se sentía el hombre más feliz cuando por las mañanas su querida esposa le servía un poco de café calentito en la cama. Iba al trabajo agradeciéndole a Dios todo lo que tenía: su humilde trabajo y familia. Me sentía interpelado viendo tanta dicha con tan poco. Pero sobre todo la inseguridad de salir cada día a esperar si le vendría alguna llamada o un poco de trabajo. Y lo confiado y feliz que estaba apoyado en su Padre Dios.

Me dije si eso no serán los primeros allá en el Reino de los Cielos. Todos los domingos acude a la Eucaristía de las 19,30 horas e imagino que será una gran dicha suponer su diálogo con el Señor. Observé que estuvo atento durante toda la reflexión y asentía con una cara felicidad todo lo que reflexionábamos en aquellos momentos.

 Más tarde, en nuestro diálogo personal, me agradeció mis palabras calificándolas como sabias y hermosas. Me quedé sin saber que decir, pero en lo más profundo de mi corazón le hice un guiño al Espíritu Santo, porque, como hago siempre, nos pusimos en su presencia antes de empezar la reflexión. Experimenté su presencia y su acción, y en mi interior di gracias por hacerse presente entre nosotros. Él era el artífice de aquellas palabras que a Jorge les parecían sabías y tanto le habían gustado.

Hoy, en la Eucaristía dominical de la tarde del sábado, experimenté que solo los pobres son capaces de embarcarse en seguir al Señor. Y pobre significa desprenderse de todo aquello que te lo impide, y sabemos por experiencia que la soberbia, la vanidad, la avaricia, las riquezas, el poder, la fama, la comodidad, el bienestar, el placer, el sexo, el prestigio, los bienes y... nos impiden amar, y si no amamos nada podemos hacer, porque seguir a Jesús es implicarse en amar a tus hermanos.

Y cuando experimentas el amor agape descubres que has encontrado ese tesoro que andabas buscando. lo creías tan lejos y lo tienes ahí, delante de ti, está en tu hermano, ese que tienes tan cerca. Porque amando al estilo de Jesús a ese tu hermano, encontrarás esa felicidad eterna que buscas sin saber ni donde ni en que realmente consiste.

Danos, Señor, un corazón de carne capaz de sentir compasión y misericordia, para que en los momentos de desprendernos tengamos la fuerza y la voluntad de llevarlo a cabo para no perder el ritmo de tus pasos. Amén.

sábado, 13 de octubre de 2012

VIVIR EN TU PRESENCIA...

 Evangelio según San Lucas

porque solo en tu presencia puedo cumplir tu Palabra. Cuando me alejo y me sumerjo en el murmullo del ajetreo mundano y me dejo arrastrar por la corriente de los criterios de los hombres, experimento que mi amor se personaliza y se hace egoísta.

Sin la presencia del Señor, mis fuerzas están a merced del mundo, y sus tentáculos me pueden y me apasionan. Soy pasto de las llamas que me devoran y la Voluntad del Padre queda desdibujada y olvidada. Me pierdo en el mundo y sus criterios.

Porque los criterios del mundo son interesados, egoístas y miran solo para el bien personal. Donde hay amor es un amor interesado, movidos por objetivos personales e intereses egoístas. Así nada importa sino yo, y mi yo prima antes que el tú, y por esa primacía estoy dispuesto hasta matar.

Por eso, en tu presencia, Señor, me fortalezco y me siento capaz de guardar tu Voluntad injertado en tu Hijo Jesús. Claro, la dicha nos viene por el esfuerzo en cumplir la Voluntad del Padre. Y esa Voluntad no es otra que la de esforzarnos en amarnos como Él, en su Hijo Jesús, nos amó y nos ama.

Y amar es buscar el bien del otro, molestarse y preocuparse por el otro. Amar es olvido de mí para estar pendiente de ti. Es difícil, diría imposible, pero confío y tengo la esperanza de que en el Señor podemos lograrlo, porque Él en su Hijo Jesús lo logró. 

Y tenemos al Espíritu Santo para nosotros también ahora lograrlo. Pongamosno en sus Manos y confiemos en que en Él podremos alcanzar la dicha de ser dichosos porque, al oír la Palabra, cumplimos la Voluntad del Padre guardando su Palabra. Amén.

viernes, 12 de octubre de 2012

OÍR PARA VIVIR

346 × 275 - Lc 11, 27-28

No se trata de decir cosas bonitas, ni tampoco hablar de justicia, verdad y amor. Se trata del esfuerzo constante y permanente de lo que oyes, en este caso la Palabra de Dios, llevarla a la vida y concretarlo en tu familia, tu trabajo, tu círculo de amigos y tu tiempo de recreo y ocio.

Se trata de ser bombilla con patas y donde quieras que estés ser luz, camino y verdad para los que te rodean y comparten la vida contigo. Se trata en definitiva de cumplir la Voluntad de Dios. Son esos los verdaderos amigos de Jesús, y los verdaderamente dichosos.

Porque la dicha no se encuentra en la escucha y comprensión de la Palabra, sin en, después de escucharla y comprenderla, ponerla en práctica. Porque solo lo que se experimenta y se palpa convence y transforma.

Y eso es lo que dice Jesús: «Dichosos más bien los que oyen la Palabra de Dios y la guardan».

jueves, 11 de octubre de 2012

PORQUE TE NECESITO, DIOS MÍO...

 Evangelio según San Lucas 11,5-13. Jesús agregó: "Supongamos que alguno de ...

estaré toda mi vida pidiéndote. Porque dejar de pedir es como perder la fe. Quien no pide puede tener fundamentalmente dos razones: a) que no necesita pedir porque está abastecido; b) que ha perdido la confianza en que le atienda, escuche y conceda el Padre del Cielo.

Por eso, Jesús, el Hijo predilecto y amado; el Hijo que nunca perdió la confianza en el Padre, nos invita a no desfallecer y pedir. Nos invita a ser inoportuna incluso con el Padre, porque nuestra constancia, insistencia y fe en pedir es la oración que conmueve al Padre y que revela nuestra confianza y fe en Él.

Así nosotros, los blogueros, no debemos desfallecer y continuar nuestra lucha por congregarnos, vernos, saber de nosotros. Somos una familia que nos reunimos una vez al año. Una familia presidida por Jesús y comandada por el Papa. Unos blogueros que nos une nuestro afán evangelizador y nuestras ansias que el Reino de nuestro Padre Dios se establezca en la tierra.

Sigamos, pues, pidiendo sin descanso. Pongamos en marcha lo del SMS, amigo inoportuno, la cuota o donativo mensual o anual, y cuantas iniciativas puedan contribuir a fortalecer nuestra unión y nuestra convocatoria anual. Nuestros amigos nos lo están pidiendo y tocan a nuestra puerta.

Pero sobre todo, no olvidemos que sin dejar de ser Marta, apliquemosno también en ser María. Nuestro camino debe siempre ir orientado, orientado por la brújula del Espíritu Santo y apoyado en el estilo de vida de Jesús: "El amor". 

miércoles, 10 de octubre de 2012

PEDIR A UN PADRE...

 Evangelio San Lucas 11,1-4.

no es lo mismo que pedir a un hermano, a un amigo o a los hermanos en la fe. Pedir a un padre es algo más seguro, más confiado y con casi total garantía de éxito. En caso que nos ocupa, pedir a nuestro Padre Dios es total garantía.

Por eso creo que Jesús nos muestra ésta singular forma de cómo orar con nuestro Padre Dios. Un padre es algo muy especial. Alguien que nos quiere profundamente y que está dispuesto a dar la vida por su hijo. Si así no ocurre con todos los padres de la tierra por sus propias limitaciones, si ocurre con nuestro Padre Dios del Cielo.

Nuestro Padre Dios nos dará siempre lo que necesitemos para ser buenos hijos y poder llegar a Él. Jesús, el Hijo predilecto, nos enseña la forma y manera de hablar y pedirle a su Padre, y al mismo tiempo nos lo descubre y revela como nuestro Padre.

Pero no se trata de pedir siguiendo nuestras inclinaciones naturales caídas por el pecado, sino según la Voluntad del Padre que sabe lo que nos conviene y lo que es mejor para nuestra salvación eterna. Por eso, santificando su Nombre primero, le pedimos que nos dé la sabiduría de alcanzar su Reino y de cumplir siempre su Voluntad.

También le pedimos, como hijos necesitados, el pan de cada día, no solo el material sino su mismo Espíritu, que nos sostiene y fortalece para la lucha diaria contra nuestra propia naturaleza caída. Sabiéndonos pecadores le imploramos el perdón de nuestros fallos, errores, debilidades, fracasos...etc.

 Pero también las fuerzas necesarias para cambiar nuestro corazón y llegar a perdonar sobre todo a los enemigos. Y muchas fuerzas, voluntad y firmeza para no caer en el juego de las tentaciones, porque nos reconocemos débiles y necesitados. Y sabemos que en Él está nuestras fuerzas y nuestra victoria para librarnos del mal. Amén.

martes, 9 de octubre de 2012

LO ESENCIAL Y FUNDAMENTAL...


 Texto del Evangelio (Lc 10,38-42): En aquel tiempo, Jesús entró en un pueblo ...
 nos pasa, muchas veces, desapercibido y sin tomar conciencia de ello. Metidos en faena nos afanamos en alcanzar nuestro objetivo: Evangelizar, y perdemos la esencia de la Evangelización. Sería bueno preguntarnos a este respecto que nos proponemos cuando evangelizamos.

Porque para emprender un camino, el que sea, lo primero es preguntarnos con quien debo caminar. Es decir, ¿lo hago yo solo?; ¿permito que alguien o algunos me acompañen? Pero sobre todo: ¿De quién tomo referencias? Porque todo camino necesita una inspiración y un saber que buscamos en él.

Si al caminar lo hacemos equivocados corremos el riesgo de perder el tiempo y de perdernos. Por eso, es bueno hacerse estas preguntas y tratar de reflexionarlas. Pero nuestra reflexión no debemos hacerla solos o juntos entre nosotros, sino como María, la hermana de Marta, nos ejemplariza hoy en la Palabra de Dios.

Es bueno ponerse manos a la obra; es bueno reciclarse y formarse; es bueno el utilizar todos los medios que están a nuestro alcance, pero solo una cosa hace falta: estar injertado en Jesús, en Él todo lo demás irá añadiéndose al camino. Es eso lo verdaderamente esencial y fundamental. No hay más.

Por eso, todos nuestros encuentros deben estar alumbrados desde Jesús, en Jesús y por Jesús. Y todo lo demás vendrá por añadidura, sin eso querer significar que nos crucemos de brazo. Me gustó mucho la frase de Carmen Álvarez Mira: "Nuestra tarea es el medio para que Dios convenza a otra persona"

Pues simplemente eso, nosotros debemos ser esos instrumentos que, ofrecidos y puestos en las Manos de Dios, seamos capaces, por su Gracia, convencer a cuantos se crucen en nuestro camino.