Jn 3, 13-17 |
DE DODIM A AGAPÉ
No se te van a pedir tus éxitos, sino el amor que hayas gastado en beneficio de los demás.
domingo, 14 de septiembre de 2025
LA CRUZ, SIGNO DE SALVACIÓN
sábado, 13 de septiembre de 2025
DE LO QUE REBOSA EL CORAZÓN, HABLA LA BOCA
Lc 6, 43-49 |
viernes, 12 de septiembre de 2025
GUÍA DE CIEGOS
Lc 6 39-42 |
—¿Qué te pasa? —preguntó Pedro, preocupado.
—Lo de siempre: me fijo en los fallos de los demás y no quiero ver los míos. Voy dando lecciones como si todo lo supiera.
—Eso nos ocurre a casi todos —intervino Manuel—. Lo importante es querer corregirse. Justo hoy el Evangelio (Lc 6, 39-42) nos habla de eso.
—¿Y qué dice? —preguntó Fernando con cierto desespero.
—Que antes de fijarte en la mota que tiene tu hermano en sus ojos, mira la viga que tienes en el tuyo. —Pedro sonrió—. Da en el clavo, ¿no?
—Tal cual —respondió Fernando, algo aliviado—. Pero, aun sabiendo esto, me avergüenzo.
—Es normal —añadió Manuel—. Cuando reconocemos nuestros pecados, damos un paso de gigante. La vergüenza nos hace más humildes y nos recuerda que somos barro, iguales que los demás.
Fernando asentía. Su rostro, aunque triste, empezaba a reflejar serenidad.
—Me consuela escucharte, Manuel. Me levanta el ánimo.
—En el Evangelio siempre encontramos luz —concluyó Manuel—. Esa luz nos anima a levantarnos y seguir caminando.
Reconocer nuestros errores, nos baja del pedestal y nos coloca al lado de nuestros hermanos. Solo así podemos caminar juntos, buscando con sencillez los senderos del Reino que Jesús abre: caminos de humanidad, compasión y comprensión mutua.
jueves, 11 de septiembre de 2025
AMAR ES LA SOLUCIÓN
Lc 6, 27-38 |
Lo había pensado en otras ocasiones: «la solución del mundo es el amor». Cuando somos capaces de amar, los problemas se desvanecen y nacen la paz y la concordia.
La cara de Pedro reflejaba gozo y alegría, en coherencia con lo que pasaba por su mente. Pero reconocía lo duro que resulta amar a quien te hace daño. No encontraba fuerzas para vivir ese amor ni lo entendía del todo.
Viendo llegar a Manuel, su inseparable amigo, decidió consultarle la cuestión.
—Buenos días, Pedro. ¡Claro que sí! A todos nos cuesta. Pero ahí está la clave.
—¿De qué clave hablas? —preguntó Pedro, sorprendido.
—De la necesidad del Espíritu Santo. Sin Él, nunca podremos amar como nos ama nuestro Señor. Incluso a los que hacen el mal.
—Mira, a mí me pasa lo mismo. Parece que va contra nuestra naturaleza. Y, sin embargo, así nos ama Dios. Esa es nuestra salvación: un amor que no se rinde ante el mal.
—Pero, ¿cómo puedo amar al que me hace daño? —dijo Pedro, con voz furiosa.
—Con la fuerza que el Espíritu Santo te da. En el Evangelio de Lc 6, 27-38 lo dice Jesús: «A ustedes que me escuchan les digo: amen a sus enemigos, hagan el bien a los que los odian, bendigan a los que los maldicen…». Si Él lo pide, es porque, con Él, es posible.
—Pero… —Intentó replicar Pedro.
—No hay peros que valgan. Jesús no exige lo imposible. Claro que nos pide renunciar a nosotros mismos, pero ya nos había advertido que ese era el camino.
Pedro bajó la voz, resignado y convencido.
—Es verdad. Amar así no es fácil.
—No lo dudes, Pedro. Amar de este modo genera resistencias interiores, pero al vencerlas se abren los corazones y nacen comunidades nuevas. Solo el perdón y el amor pueden romper las espirales de violencia que amenazan la paz y la justicia del mundo.
miércoles, 10 de septiembre de 2025
¿DE QUÉ LADO QUIERES ESTAR? TÚ ELIGES
Lc 6, 20-26 |
Todo tiene su principio, pero también su fin. Nada, al menos en este mundo, es eterno. Sin embargo, dentro de nosotros llevamos una chispa de eternidad. Nuestra máxima aspiración es la vida eterna.
Obsesionado con estas elucubraciones, Pedro se debatía interiormente buscando respuestas al camino que debía tomar mientras caminaba por este mundo. Su meta era alcanzar esa vida eterna con la que soñaba.
Levantó la mirada, y su alegría fue repentina: sus
ojos contemplaban la llegada de su amigo Manuel. Con él —pensó— aclararía ese
interrogante que tanto le apremiaba.
Jesús nos indica dónde podremos descubrir alegría y consuelo, sentido y luz, paz y solidaridad. A nosotros nos ofrece libertad para que podamos decidir.
martes, 9 de septiembre de 2025
PORTADORES DE LA BUENA NOTICIA DEL REINO
Lc 6, 12-19 |
lunes, 8 de septiembre de 2025
EL CAMINO DE DIOS
Mt 1, 28-23 |