Es Navidad y nace
un deseo de paz y gozo en el interior del corazón humano. Sin embargo, al mismo
tiempo, los poderosos se sienten amenazados por ese deseo de paz y amor, y
sienten la tentación de dejar claro que son ellos los que mandan y los que tienen
que ver con la paz y el amor.
La soberbia, la
vanidad, las ambición son pecados que se resisten a la Navidad. Porque, Navidad
es tiempo de paz y amor nacidos de ese Mesías que nace en ese tiempo elegido
por Dios y que viene enviado por Él a anunciar a los hombres su Infinito Amor y
Misericordia.
La Buena Noticia
que es anunciada a los pastores y que les llena de esperanza contrasta con la
obstaculización promovida por los poderosos que se sienten amenazados por ese
Niño Dios nacido en Belén. Una amenaza que sólo sale de sus corazones
endiosados, ensoberbecidos, mal intencionados y egoístas. Causa de ese
ensoberbecimiento origina la muerte de los santos inocentes, víctimas siempre
de aquellos que no quiere transigir con lo que es inhumano.
Los Herodes de todo los tiempos estarán siempre en pie de guerra al sentirse amenazados por la verdad, la justicia y la paz. Y por la esperanza de un mundo mejor, más digno y fraterno, en el que todas las personas somos hijos de un mismo Padre Dios. Belén representa todo eso que cualquier hombre, desde el más inhóspito rincón de este mundo, alberga en lo más profundo de su corazón: Amor y Paz. Y eso, al parecer, está reñido con los soberbios y poderosos.
«Belén representa todo eso que cualquier hombre, desde el más inhóspito rincón de este mundo, alberga en lo más profundo de su corazón: Amor y Paz.» Es así. «Los Herodes» como usted los llama, tienen el escenario perfecto: un mundo dislocado, una sociedad abierta a cualquier cosa menos a los valores éticos; una sociedad que todo lo resuelve a los tiros, a la violencia; por suerte o por obra del Señor, a la gente le impota el arbolito y sus luces en esta época. En mi país, Argentina, donde 6 de cada 10 empleados informales -es decir sin seguridad social- viven en hogares pobres, esto se acentúa en jovenes de de 16 a 24 años, la informalidad laboral es enorme en las personas de niveles educativos básicos (6 de cada 10).. Cuando estos expulsados del sistema, me vienen a pedir dinero para comprar leche, le doy una caja de leche abierta, por la sencilla razón que si le doy dinero o caja cerrada la venden para comprar droga, falopa, merca como decimos así.
ResponderEliminarEn este mundo, deben moverse "los angeles de Dios" para que Belen sea constituya en la esencia de cada familia que busca paz y amor... y el hombre, maravillosa creatura, que con su libre albedrío, vive en un constante pendular entre al instinto de las bestias y la obediencia de los ángeles, deberá mutarse una y otra vez para alcanzar la felicidad plena en el Señor.
Le mando un fuerte abrazo en Cristo.
Claudio tiene usted mi aprobación. Todo lo que sea anunciar la Buena Noticia es misión de un creyente. Y, a propósito, le invito a apuntarse a la página FaceBook de la Buena Noticia: https://www.facebook.com/groups/anunciabuenanoticia?checkpoint_src=any
ResponderEliminarGracias, un fuerte abrazo en el Señor.