jueves, 14 de octubre de 2021

Y LO MISMO SUCEDE CON LOS PROFETAS CONTEMPORÁNEOS

 

Los tiempos avanzan, pero, aunque parecen que cambian, en apariencias solo se contemplan avancen en orden técnicos y científicos que inciden también en nuevos males éticos y morales. Los profetas contemporáneos siguen amenazados y muchos son reos de muerte. Solo, como antiguamente, despues de muerto, se les reconocen, se les edifican sepulcros y mausoleos de grandes dimensiones y hasta se les dan honores y premios. Pero, ¿se recuerda y se trata de vivir lo que nos decían y profetizaban?

Esa es la cuestión y lo que Jesús denuncia hoy en el Evangelio de este día: (Lc 11,47-54): En aquel tiempo, el Señor dijo: « ¡Ay de vosotros, porque edificáis los sepulcros de los profetas que vuestros padres mataron! Por tanto, sois testigos y estáis de acuerdo con las obras de vuestros padres; porque ellos los mataron y vosotros edificáis sus sepulcros. Por eso dijo la Sabiduría de Dios: ‘Les enviaré profetas y apóstoles, y a algunos los matarán y perseguirán’, para que se pidan cuentas a esta generación de la sangre de todos los profetas derramada desde la creación del...

Y, ahora, somos nosotros esa generación y los directos responsables de esos actuales profetas que nos hablan, que nos anuncian la Palabra de Dios. Indudablemente que se nos pedirá cuenta. Tanto a los que anuncian como a los que reciben el anuncio, porque, todos somos responsables de lo que escuchamos, anunciamos y, en consecuencia, vivimos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.

Tu comentario se hace importante y necesario.