Sin lugar a discusión, desde esa atalaya, tú y yo, debemos tener muy claro que la Palabra y la Buena Noticia de Jesús nos plantea serios problemas. Los poderosos, a pesar de entender que la verdad va por ahí, no la aceptan, miran para otro lado y se dejan seducir por el bienestar temporal, la felicidad construida sobre arena movediza y los espejismo del placer y la belleza. El príncipe de este mundo tiene todas esas cartas y juega siempre con mucha ventaja. Sobre todo sobre aquellos que se desinteresan de escuchar la Palabra de Dios y, piensan, que solos se bastan. Quedan a merced del mundo, demonio y carne.
Jesús lo sabe y nos lo advierte. Si están conmigo el mundo les odia, porque también me odian a Mí. Ahí se esconde la clave del perseguimiento a la Iglesia, de la amenaza a todo lo que huele a católico, a valores cristianos, a…etc. Les molesta y se desvanecen los sexos por imaginar situaciones y formas de derrumbar a la Iglesia. Saben, como lo sabía Gamaliel, y se los advirtió – Hch 5, 34-39 – que no podrán con la Iglesia. Y eso les molesta y les preocupa más. Van ya XXI siglo y la Iglesia sigue su curso. La sangre de los mártires aumenta la cristiandad. Estamos dispuesto a dar nuestra vida al igual que la dio nuestro Señor. Y ese es el Camino, seguirle, porque solo Él es Camino, Verdad y Vida.
Gracias!!!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo en Xto. Jesús.
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