miércoles, 19 de octubre de 2011

¿DE QUIÉN HAS RECIBIDO LO QUE TIENES?

Lucas 12,39-48.

Buena pregunta: ¿De dónde me viene todo lo que tengo? Es la pregunta que nos podemos hacer todos, sobre todo aquellos que han recibido tanto. Cada persona es su propio administrador, pues de él sólo dependerá rendir cuenta de los dones recibidos. Nadie puede suplantar a otro. Y hay muchas personas que han recibido la cualidad de una buena voz, la agilidad y destreza para realizar una cierta habilidad...etc.

Hay muchas personas que conocemos por su fama vinculada a esas habilidades. Cantantes, deportistas, científicos, médicos, escritores, inventores...etc. Todos destacan por esas cualidades que realizan, y al mismo tiempo les aportan grandes beneficios. Pero, ¿de dónde le vienen esas cualidades? ¿Por méritos propios?

Esa es la tarea que cada uno debe descubrir, y poner todo lo recibido al servicio de su amo. Porque si se constituye en su propio amo, cuando venga el Dueño de esos talentos concedidos puede encontrarlo usándolos mal. 

Debemos estar preparados para que no nos sorprenda la venida del Dueño de la Casa. Debemos ponernos en marcha ahora, aprovechar el tiempo, porque si somos sorprendidos usando mal esos talentos, mala va a ser nuestra suerte. El mundo depende de cada uno de nosotros, sí, de ti y de mí, y de lo que cada uno hagamos con los dones recibidos.

Quizás, SEÑOR, yo no haya recibido mucho, y mi faena
puede ser la de aceptarme como tal. No desear
las cualidades y riquezas de otros puede
ser la administración que TÚ me
encargas en mi vida.

Quizás, SEÑOR, sea una enfermedad o una vida donde
el sufrimiento tenga fuerte presencia, y me 
cueste mucho aceptarlo. ¿Puede se
esa mi tarea?

Dame, DIOS mío, la sabiduría, la fortaleza de discernir
lo que TÚ quieres de mí, y la luz de poder
cumplir con tu Voluntad, para que
cuando me visites, todo
esté como TÚ deseas. Amén.

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