martes, 20 de octubre de 2015

CUESTIÓN DE VIGILANCIA ACTIVA

(Lc 12,35-38)


Es bueno saber que esperamos a Alguien. Alguien muy importante, el más Importante, y que vendrá a salvarnos. Tener esta perspectiva presente nos ayudará a soportar muchas esperas amargas, cansinas y hasta confusas. Nos ayudará a soportar los momentos y circunstancias en que todo se nos pone oscuro, mal y nos amenaza con destruirnos.

Servir es nuestra bandera, y servimos en todo momento. Incluso cuando no entendemos lo que sucede, y, sobre todo, cuando nuestros esfuerzos se ven amenazados y hasta destruidos. Eso es el único significado del amor: soportar sirviendo. Porque amar estando a gusto y a favor de la corriente nos gusta a todo, y es muy fácil. Esa clase de amor, que también hay que saber saborearla y agradecerla, no es la cara más importante del amor. El amor es verdadero amor cuando presenta la cara del sufrimiento, de la tristeza, de la renuncia, del compartir penas y dolores.

Estar prestos a abrir la puerta cuando el Señor, nuestro Señor, nos llame, es estar en estrecha y activa vigilancia frecuentando los sacramentos, la Eucaristía y la Penitencia, y en constante oración. No hay otra forma de vigilar. La oración es el ejercicio que nos mantiene activos y en permanente actitud de servicio. 

No se trata de hacer cosas, de ser muy activo. Igual nuestro servicio es acompañar, estar y ayudar con nuestra simple presencia. Servir es experimentar que estás esforzándote por aliviar a otra persona que lo necesita, no por capricho. Personas que necesitan tu consejo, o tu testimonio, o tu luz, o simplemente tu actitud de escucha, de darle espacios para desahogarse, para albergar esperanzas de vivir y de encontrar una razón para esperar la salvación.

Servir es estar en actitud de amar. Y amar es estar en actitud de servicio. Ambas actitudes hacen una: Amor. De tal manera que amor sin servicio, es mentira. Y servicio sin amor, es interés. Pidamos al Espíritu Santo que nos ilumine y nos dé la sabiduría de entender y vivir el amor sirviendo.

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