Mt 2, 1-12 |
Posiblemente hoy
sea un día para preguntarnos donde está mi Belén. Porque, fue y es en Belén
donde me espera Jesús. Su nacimiento fue discreto y sin bombos ni platillos.
Simplemente se les anunció a los pastores, pobres y marginados, y se les invitó
a ir a ver a ese Niño Rey que había nacido en Belén. No se impuso a nadie la obligación
de ir a adorar al Niño, solo se invitó y anunció que había nacido el Mesías
prometido.
Con estas palabras
quiero significar que el encuentro con Jesús nace de un deseo e inquietud de
encontrarte con Él. Ese deseo lo manifiestan muy claramente esos reyes magos
venidos de Oriente. Guiados por esa estrella y llenos de curiosidad por dar
respuesta a ese interrogante que les mueve y les atrae se ponen en camino.
Quieren conocer a ese rey que deducen detrás de esa luz incierta que les
proporciona una estrella y buscan encontrarse con Él para presentarles sus regalos
y adorarlo.
En el lado
contrario se encuentra Herodes, asustado y temeroso de verse desplazado de su
poder y estatus por ese rey nacido que anuncian. Sería, pienso, un nuevo y bien
año de reyes sacar conclusiones y deducir donde y de que lado estamos nosotros.
¿Del de los reyes de oriente o del de Herodes? Porque según donde nos veamos
podemos descubrir a que rey adoramos. Sí, porque quieras o no todos tenemos
nuestro rey o reyes.
Podría ser el rey
dinero, o el rey poder. Quizás el rey placer o egoísta o cualquier otro rey que
busca solo nuestros egos y satisfacciones. Herodes tenía el suyo y no quiso más
rey, por tanto buscó la manera de quitarlo del medio. También nosotros podemos
estar haciendo lo mismo y buscamos la manera de poner a nuestro rey, al que nos
gusta y queremos. Eso significa quitar al que ha nacido en Belén.
De cualquier manera, Jesús, el Niño nacido en Belén nos espera. Y esa espera la tienes que activar tú y yo. Hay un camino – tu vida – por la que puedes llegar a Él, conocerle y ponerte en marcha desde Él y asistido por su Espíritu. Entonces has encontrado el verdadero regalo que nos trae esta noche de reyes.
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