viernes, 20 de enero de 2023

UNA RESPUESTA DIFÍCIL Y COMPLICADA

La elección de los doce es un misterio. Nos podemos hacer muchas preguntas pero ninguna tiene respuesta. Jesús elige a doce de los discípulos que le seguían porque quiso hacerlo así. Eligió a los que eligíó, hoy los conocemos, porque quiso hacerlo así. Los conocía y sabía de sus debilidades y miserias hasta el punto de que se quedó solo en la cruz.

La llamada del Señor depende y es sola de Él. No podemos nosotros elegirnos ni subirnos a la Barca por nuestra cuenta. Será el Señor quien nos invite y nos ponga en el lugar que nos corresponde. Eso sí, tendremos que estar siempre abiertos a lo que Él decida de nosotros y, fortalecidos en esa espera y paciencia, estar a su lado humildemente y disponible a seguirle.

Será siempre difícil y complicado responderle. Porque, la cuestión es olvidarnos de nosotros y darnos a los demás. Fue lo que hizo Él y lo que el seguirle nos exigirá. Por tanto, la imposibilidad de realizarlo es más que evidente. Solo por su Gracia y acción de su Espíritu podemos sostenernos en su Voluntad y responder a su llamada. A esa llamada que el quiera para cada uno de sus hijos.

A nosotros nos toca rezar y rezar. Rezar cada día con deseos de encontrarnos con Él y de deja que nuestro corazón ame y ame como Él nos ama. Rezar y esperar a que el decida por donde debemos ir y caminar según su Voluntad. Eso sí, nos toca estar a la escucha, atento y expectante y en actitud perseverante de oración. Amén.

3 comentarios:

  1. Hola Salvador, soy Claudia de la parroquia de Puerto del Rosario . Recién en un curso bíblico del miércoles, tocó describir las escenas del Evangelio de este domingo, mañana 22.
    Pues, en lo que me he fijado como tercera escena ha sido la llamada de los primeros cuatro apóstoles, humildes trabajadores de la mar, y con todo lo que seguirá de escenas relacionadas con la pesca, milagros y aparición de Jesús sobre las aguas. Quiero decir que aquí ni siquiera se les conoces por ser odiados como Mateo o amados como Juan, sino por ser hijos de, hermanos, y hombres, lógicamente no pudieran haber sido desde un comienzo mujeres. Jesús fue carpintero, y ellos marineros. O sea personas humildes, sin apenas conocimientos relacionados con otras disciplinas, excepto el Maestro, yo pienso que El nos quiso esperanzar a que toda la gente seamos, sin o con cultura, constructores del Reino.

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  2. Claro, estoy de acuerdo. Jesús, el Señor, elige al que quiere y de la condición que quiere. Para amar, el primer y único mandato que nos da, no hace falta tener títulos academicos, simplemente amar. Si se tienen tampoco importa siempre que se intente y se esfuerce en amar. Hubo algunos con cierta formación como Mateo, recaudador, y otros, aunque no apóstol, quizás discípulo de Pablo, como Lucas. Sin embargo, el conocimiento no es ni condición ni obstáculo para proclamar que Dios es nuestro Padre y su Misericordia Infinita y por Jesús, el Hijo, recuperamos nuestra dignidad de hijos.
    Gracias por tu comentario. Un fuerte abrazo en Xto. Jesús.

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