viernes, 21 de marzo de 2025

CERRADOS A LA ESCUCHA DE LA PALABRA

Vivimos con cierta indiferencia a nuestro destino. Imbuidos en el consumo de un mundo que nos seduce con sus ofertas, desde siempre no hemos rebelado contra nuestro propio origen y destino. ¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos? ¿Dónde esta nuestra felicidad? Porque, una cosa es clara, buscamos la felicidad.

La realidad, nuestra propia realidad, es que hemos sido creados y provisto de todo lo necesario, y capacitados de libertad y talentos para, con nuestro esfuerzo, construir el mundo en el que vivimos y alcanzar la felicidad que buscamos. Porque, hemos sido creados para ser felices eternamente. Sin embargo, no despertamos a ese bien del que dependemos y del que hemos recibido todo lo que somos y tenemos. Y nos negamos a devolverle los frutos que espera de nosotros.

Podemos decir que de alguna manera nos negamos a ser felices. Precisamente para lo que hemos sido creados. Y, el Creador, ha enviado a Profetas una y otra vez y los hemos matado. Por último nos ha enviado a su Hijo predilecto, y hemos hecho lo mismo, le hemos matado. Y erre que erre seguimos haciéndolo cada día de nuestra vida. ¿Hasta cuándo vamos a resistirnos a la escucha de la Palabra de nuestro Creador?

Mientras, nuestro Padre Dios, nos sigue amando y perdonando. Y nos espera con Infinita Misericordia a que nos demos cuenta de todo su Infinito Amor y le devolvamos esos frutos de gloria y alabanza por todo lo que somos y nos ha dado gratuitamente sin merecerlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.

Tu comentario se hace importante y necesario.